Paraguay: Crecimiento, estabilidad y rentabilidad.

Paraguay ha vivido etapas con importantes cambios en su economía, superando severas crisis financieras en los noventa y principios del nuevo milenio, ajustes fiscales y de deuda a mediados de la década pasada, y se ha visto favorecida por escenarios externos positivos, que, sumados a la estabilidad macroeconómica, propiciaron años de crecimiento notable del PIB y del PIB per cápita.

 

Paraguay es uno de los países que mejor pudo afrontar la pandemia de COVID-19 debido a su estabilidad y disciplina macroeconómica. En plena pandemia el sector de construcción fue el que creció mayormente en un 12,6% y se atribuye a dos factores, los proyectos que habían sido iniciados pre pandemia continuaron y fueron terminados, y otro fue la caída de tasas y mucho de ese capital de los bancos salió y fue al ladrillo. Como dice Amilcar Ferreira, en una charla sobre la Situación actual del Paraguay; "Mucha gente buscó en el ladrillo un refugio para su dinero, y eso impulsó el crecimiento del sector inmobiliario". Este país se ha beneficiado de sus sólidas políticas macroeconómicas durante las últimas dos décadas. Entre 2003 y 2019, promedió un crecimiento del 4,1%, manteniendo una deuda pública y externa baja así también una inflación baja y estable.

La economía paraguaya se recuperó fuertemente en 2021 después de dos años de recesión debido a la sequía en 2019 y la pandemia COVID-19 en 2020. El PIB real creció un 4,2% interanual en 2021, impulsado por el fuerte crecimiento de la inversión fija, tanto en obras de construcción privadas como públicas, así como por el crecimiento del consumo privado.

En mayo 2021 empieza la suba y cada mes la inflación interanual fue más alta. Pero, para este último tramo los números apuntan a que el segundo semestre del 2022 tiende a ser mejor gracias a la suba de tasas del BCP y la absorción plena del aumento de los precios del combustible. Los productos que más subieron de precio: transporte (por el combustible) y alimentos.

Paraguay sigue liderando los climas de negocios a pesar de todos los impactos con bajos impuestos, el país con más esquema impositivo más competitivo del planeta, con bajos costos relativos también. En cuanto a la producción, el crecimiento fue impulsado principalmente por los servicios, seguidos por la industria manufacturera y la construcción. No obstante, el aumento de inflación en la segunda mitad del año y la sequía resultaron en un pequeño descenso de la tasa media de desempleo de tan solo el 0,4% (interanual).

Con respecto al rubro inmobiliario, las perspectivas de crecimiento del rubro son de 3,6% para los años 2022 y 2023.  Paraguay sigue liderando los climas de negocios a pesar de todos los impactos con bajos impuestos, el país con más esquema impositivo, competitivo y con bajos costos relativos.

 Fuente: https://www.bancomundial.org/es/country/paraguay/overview#1

 
Gonzalo Faccas